Cinco artículos religiosos perfectos para cualquier hogar cristiano

Sin lugar a dudas, la Biblia es el libro esencial para cualquier persona que se considere creyente en la fe cristiana, y es además uno de los documentos fundamentales de la humanidad. La Biblia es un conjunto de textos que datan desde cientos o incluso miles de años antes del nacimiento de Jesús, hasta su nacimiento y posterior vida y predicación.

Todos estos textos, compilados durante los siglos posteriores al nacimiento de Jesús y con una fuerte raigambre en la Torá judía –que compone buena parte del Antiguo Testamento–, conforman el eje de la historia, la filosofía y la teología del cristianismo, así que es de enorme importancia tenerlos a mano en casa para poder consultarlos con agilidad siempre que lo necesitemos.

Un rosario es un elemento que no suele faltar en los hogares cristianos. Complemento idóneo para el rezo, la historia de los rosarios católicos se remonta, al menos, al siglo IX, pero tiene su origen en oraciones a la virgen muy anteriores procedentes de Europa del Este y Oriente Próximo.

El rezo del rosario pasó a asociarse con un collar de cuentas similar al kombolói griego en algún momento de la Alta Edad Media, y, tras su llegada a Occidente, pasó a formalizarse el rezo del rosario tal y como lo conocemos en la actualidad. Se trata de una forma de rezo que está muy próxima a la meditación y que puede tener un efecto muy beneficioso si se realiza de manera adecuada.
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Las figuras de la virgen y de otros santos suelen ser complementos muy habituales en las casas católicas, aunque sus materiales varían considerablemente. Ya se trate de figuras de cera, resina, plástico, yeso, mármol o tallas de madera, las figuras son una de las principales características de la religión católica frente a credos que, como el islamismo, prohíben la veneración de figuras y se limitan a rezarle a una concepción abstracta del mundo espiritual.

Además de ser un excelente recurso decorativo, las figuras religiosas crean armonía en cualquier lugar y son una magnífica forma de recordar de forma habitual nuestra necesidad de mantenernos en contacto con lo divino.
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Los crucifijos son uno de los símbolos más característicos de la cristiandad. Además de conmemorar el momento en que Jesús murió en la cruz, nos recuerdan su presencia en el mundo terrenal y la importancia de seguir fieles a los valores que predicó durante aquellos años. Los crucifijos pueden ser de muchos tipos, desde pequeños colgantes hasta grandes crucifijos de pared, pasando por crucifijos de escritorio que podrás colocar sobre cualquier superficie plana como una repisa, una mesa o un mueble auxiliar. Los hay de una amplia variedad de materiales y para todos los gustos, así que solo será cuestión de elegir el que más te guste.
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Las estampas son uno de los artículos cristianos más tradicionales, y tuvieron un gran auge especialmente durante los siglos XIX y XX. Con diseños que pueden evocar a un santo, a la virgen o a cualquier otro elemento de la cristiandad, las estampas son pequeños recordatorios de la enorme vastedad de la religión católica y de la vida y obra de diferentes santos y personas devotas.

En algunas zonas rurales, las estampas son objetos que realmente ameritan ser atesorados y conservados de generación en generación, y en cualquier parte del mundo suele ser habitual conservarlas para recordar a un familiar o un ser querido ya fallecido.

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